ORM

nº1

Cuando la puerta de mi cuarto vuelva a cerrarse

se habrá caído de nuevo este saco de huesos,

y la pregunta es, que hace un saco con un cuarto para él solo?

nº2

Hoy muchas pastillas cerraron mi noche

un sueño donde había un baúl que abría a muchas pesadillas

el pelo de debajo de tu nariz se hacía largo y más largo, dominaba toda la casa

así que tuve que salir

mi patas de gacela pedaleaban 

las imaginé como las aspas de un ventilador

mis ojos sólo veían las calles covertirse en rallas horizontales acercándose a mí cada vez más fuerte y más veloces

llegó un momento en que mi cuerpo terminó cansándose

en que si tu persecución llegase a atraparme o no, ya no me importaba

nunca creí que estuviera a salvo,

sabía que andabas por aquí

pero no tan cerca

Caray! Y yo que nunca había visto a un león llevar los ojos tan negros.

nº3

A las once

vendrá a acostarse conmigo

lo que dicen que es, subir al cielo

no voy a mencionar las nubes, pues son etéreas

como tu amor, que no sabe sostenerse

antes al acostarse, solía hacerme levitar

a las once vendra acostarse conmigo

lo que dicen que es, el firmamento

lo que sentimos todas

o las que él elije

nº4

ahora que habito en el ebano,

recuerdo haber sido absorvida por sus pupilas la primera vez

ahora que mi cuerpo es azul, pero mi piel sigue siendo de seda

resbala todo lo que cae sobre mi, y se ven las formas de las cosas que ocultas

sus ojso de uva

oscuros,

debi sospechar

que para ver el sol amanecer, primero tienes que ser oscuro.

nº5

ya ha dicho dos palabras y un monje toco el gong de mi cuerpo

no necesito ponerme lentes oscuros para tostar su piel

sus labios escupen muchas efes y eses que dañan mis oidos

no va a golpearme, tranquila, no va a escaparse de ti

dos uvas no dejan de mirarme

ya han pasado 40 mil personas

el pastelito tiene pepitas de chocolate como sus ojos,

me mira por todos lados

y el jugo de piña, sigue en su boca

la banca del parque ya no me duele 

y su casaca nike azul y roja...

me gustan esos colores

ojala nunca hubieramos rosado los sacos de carne que todos los dias cubren nuestros dientes

ojala nunca hubiera tomado ese jugo de piña

el pastelito de chocolate con miles de sus ojitos siguen mirándome.

aún creo que el jugo llevaba algo.